Este año hemos vivido un proyecto de Carnaval muy distinto en el que nos hemos implicado e ilusionado mucho desde el comienzo. En línea con nuestro Proyecto de Innovación Educativa “Guardianes de la Sierra”, hemos tratado de llevar a cabo un Carnaval lo más sostenible posible. Para ello, hemos reutilizado telas, ropas, retales varios, complementos, cartones, restos de papeles y cartulinas etc. a partir de los cuales hemos creado nuestros propios disfraces.
Pero … ¿por dónde empezamos si no sabemos coser? Era necesario aprender, así que de la mano de algunas voluntarias recibimos unos interesantes talleres de costura que nos dieron las claves para aprender lo básico. A partir de ahí … ¡voló nuestra imaginación! y tras días de trabajo, ¡por fin llegó el viernes de Carnaval!
En Prádena hicimos un desfile hasta la plaza mayor del pueblo, pero no de cualquier manera, ¡haciendo una batucada! Como en otros cursos escolares hemos reutilizado envases que nos han hecho las veces de instrumentos convirtiéndonos así en auténticos artistas mientras lucíamos además nuestros disfraces.
En Navafría montamos un auténtico circo con bailarinas, payasos, domadores, acróbatas etc. que animaron las calles llenándolas de color y alegría, concluyendo este pasacalles en la Plaza Mayor donde realizamos un divertido espectáculo circense.
Agradecemos a las familias su colaboración, así como a “Tapicerías Castaño” que nos dio numerosas muestras de telas.
Pero ya sabemos que nuestro Carnaval termina el miércoles de ceniza con el tradicional entierro de la sardina. Como cada año, hemos hecho una sardina gigante con papel, en la que dentro introducimos, escritos en un papel, nuestros miedos. Tras tomarnos un rico y calentito chocolate, y vestidos de riguroso luto, al son de los ritmos de la batucada prendíamos fuego a la sardina cargada de miedos de la que solamente quedarían sus cenizas.
¡Deseamos que hayáis pasado bonitos días y que Don Carnal nos espere a todos y a todas el próximo año!
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